martes, 16 de abril de 2019

Lagrimas por Notre Dame

«Y la catedral no era sólo su compañía, era su universo, era toda su naturaleza. No soñaba con otros setos que los vitrales siempre en flor, con otras umbrías que las de los follajes de piedra que se abrían, llenos de pájaros, en la enramada de los capiteles sajones, otras montañas que las colosales torres de la iglesia, otro océano que París rumoreando a sus pies». Pocos pasajes más hermosos que éste de Victor Hugo (Besanzón, 1802-París, 1885), extraído de su novela « Nuestra Señora de París» (1831). Cuando lei "El jorovado de Notre Dame" era una niña, fue uno de mis primeros libros, me marco de tal forma que desde esa lectura me hice seguidora del arte Gotico, cargado de romanticismo, a la par de oscuras sensaciones. El poder de sus columnas, sus vitrales y todas sus ojivas se impregnaron en mi, hasta convetirse en casi un culto, nada que ver con la religion, si no con la sensacion de sentirse pequeña y vulnerable a la vez de protegida entre esos muros. No conoci Notre Dame, nunca fui a Paris, pero la amaba aun sin haberla visitado, pero he leido tantas veces esa novela que conocia todos sus rincones,esos rincones que fueron el refugio fisico y espiritual de Victor Hugo. Ayer las lagrimas cubrieron mi rostro, pero se que él y su personaje Quasimodo, hubiesen llorado amargamente, al ver como el implacable fuego devoraba su gran refugio y musa la Catedral de Notre Dame. By nekrokris

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